22 jul 2014

DESPEDIDA

Ya no sé si deba escribirte, es demasiado lidiar contigo y los putos recuerdos, pero me siento obligado hacerlo aunque nunca llegues a leer estas líneas que pienso que serán las ultimas que te dedico.

Por mucho tiempo, te di lo mejor de mí, de ti todo de mí, hasta mi manera insoportable de amarte, simplemente porque contigo llegue a sentir lo que por nadie había sentido, puede que quizás nunca llegue a sentir algo similar o superior por alguien, puede que no, puede que sí, al fin al cabo yo siempre te quise aun cuando nunca hiciste nada para que así fuera, quizás algún día exista alguien que no tenga que hacer mucho o poco para llegar amarlo desde la misma manera e intensidad como un día te amé a ti. Este amor fue solo mío, mío nada más.

Después de todo, lo único que quiero es darte muerte con cada una de mis líneas, ya han sido muchos meses lo que por ahí he agonizado y siempre fuiste un maldito al que nunca le importo lo que sentía. No sabes cómo me arrepiento haber caído en tus palabras, sin duda algunas me enamore de tus mentiras, yo creo en tus palabras sabes, y creí tanto que las sentí muy mías, no nunca me perteneciste, nunca.

Fueron innumerables veces las que yo preferí morir, negarme a mí mismo y enfrentarme a cualquiera por demostrarte lo que sentía, mis putas lágrimas siempre terminaron en la tierra, no sabes cuantas veces desee que me abrazaras, que me acunaras en tu pecho, pero solo veía tu indiferencia, de haber sabido que amarías con desprecio, con la locura de tus manos y con la durezas de tus palabras, mismas que agitaban cada fibra intima de mi ser, nunca me hubiese entregado. Recuerdo tu ceño fruncido la señal de tu inmenso amor, el que me hacía sonreír y desfallecer al mismo tiempo, te juro por mi madre hijueputa que de haberlo sabido jamás me hubiese entregado a ti.
Siempre te pedí que fueras sincero, que me fuiste infiel lo fuiste e innumerables veces, aun no termino por contarlas, siempre quisiste tapar el sol con un dedo, fueron muchas veces las que te perdone, todavía recuerdo la vez que llegaste a casa con nueve chupetes en el pecho, seré vulgar pero más grande fue tu vulgaridad, seguro te encanto como te cogía ese hijueputa, te perdone y porque no lo iba hacer si yo también fui infiel, pero nunca te mentí, las verdades te las servía en la mesa, sin embargo a vos nunca te afecto como a mí me afecto saber todas tus putadas. Te fui infiel porque bajo los efectos del alcohol encontré afecto en alguien que no me lo negó. Cuantas veces pude haberte dejado, pero luche hasta el último momento para darte todo de mí. 

Nunca tuviste familia, nunca la has tenido, yo te di de comer, y te ayude en todo en cuanto puede sin embargo me pagaste con traición, pero ese tipo de gente que muerde la mano que le da de comer, usualmente lame la bota de quien lo patea. 

Hace unos días atrás tenía el alma hecha mierda, por ti ya no sabía que sentir, tengo aun un leve resentimiento por todo el daño que me hiciste, y a la vez la conmiseración que me da de que a estas alturas del partido, no sepas ni para que viniste a este mundo. Haz hecho de tu vida un bacanal de falsificaciones, que si te veo no sé cuál de todas es tu cara.
Hoy solo corro lejos de ti, a donde no se pronuncie tu nombre, donde no contamines mi existencia, y que el eco de tu voz no me quite la paz ni el sosiego.

Vete lejos, al infierno o al paraíso no sé, solo vete lejos de mí. Ya ha sido suficiente. ¿Puedes ver el “no me interesas más en mi frente”? ¿Puedes notar mi indiferencia hacia tus caricias?
Tomaste tu tiempo, pero te excediste, ahora solo veo a un bebé llorando por su juguete perdido.


Por ti gasté mi tiempo y mi dinero y no fue divertido,
Buscaré un nuevo juguete, un nuevo prospecto, tú eres un muñeco de acción sin cabeza,
Tú no puedes luchar sin cabeza,
Perdiste tu cabeza, perdiste tus ideas y perdiste el sentido de lo que buscas, quizá me buscarás,
pero estaré tan lejos y tan cerca de ti que nunca me encontrarás…

Fuiste, sos y serás mi peor error, y no te quiero volver a ver, ni en esta vida ni en la otra. H e decidió salir adelante, divertirme ¿y qué crees? Lo hare, no tengo miedo, nunca lo he tenido, pero ahorita lo único que temo es haber olvidado escribir algo, porque para serte sincero, ya mis letras no te pertenecen. Desde ahora en adelante tan solo serás un recuerdo gris, una fotografía que las horas poco a poco irán difuminando.
Por mi parte ten seguro que ahora me ocupo de cosa más importante que pensar en ti.
PD: Lo mejor sería no verte, porque si te veo, te diré toda esta mierda en la cara.

Ian David Briceño Aguilar.

No hay comentarios:

Publicar un comentario